CONCLUSIONES
DÍA DE LA CONCIENCIA NEGRA
El sábado 22 de noviembre, tal y como estaba anunciado, se llevó a cabo en el Movimiento Afrocultural la conmemoración del Día de la Conciencia Negra.
La jornada comenzó con la proyección de un documental sobre la comunidad afro descendiente Cambacuá de Paraguay.
Luego de la misma, y tras preparar el espacio, tuvimos el honor de contar con la danza de Isa Soares, matriarca y precursora de la danza afro en la Argentina.
Isa danzó junto con sus alumnas durante más de media hora, llenando el espacio con el Xirê de Orixás.
Consideramos que no hay palabras, fotos ni videos que puedan retransmitir esa danza.
Tras su danza Isa pronunció unas breves palabras, con la respiración entrecortada, aclarando lo innecesario de la palabra en ese momento, expresando que ya toda su inteligencia y lo que tenía para decir había sido dado a través del lenguaje del cuerpo.
Al finalizar esta actividad las personas que asistieron tuvieron un rato para estirar las piernas, tomar o comer algo y apreciar los instrumentos, títeres y otras artesanías creadas en el marco del taller del Grupo Liberación del Movimiento Afrocultural.
Asimismo, en el stand que ofrecía dichos productos, con los que nuestras actividades se sustentan, ya que no recibimos aportes de ningún tipo, estaban también expuestos videos documentales sobre diversas problemáticas tanto de la comunidad afro y de Pueblos Originarios como de otros sectores latinoamericanos y folletería gratuita cuyo objeto es nuestro fin más importante, visibilizar, concientizar y continuar concientizándonos, ya que es un proceso que nunca termina.
Consideramos que esos momentos que estaban por fuera de las actividades programadas fueron muy importantes, porque permiten que la gente dialogue y se conozca.
Con gran alegría observamos que, efectivamente, nuestro objetivo de que la participación sea familiar se había cumplido, y, que además, se habían acercado personas como el consejero del embajador de Sudáfrica en la Argentina, Victor Rambao, cuyo apoyo a nuestro espacio agradecemos.
Luego de este corte se le dio comienzo a la siguiente actividad, la charla debate.
La diputada Diana Maffía hizo su aporte más que interesante hablando entre otras cosas sobre la extranjerización y vaciamiento de la cultura, usando la metáfora de que el sistema intenta convertirnos en hamburguesa, en fast food, de rápida digestión, y que si no aceptamos esa conversión intenta desecharnos, puesto que no le servimos. Esta metáfora es inequívoca para la situación que nosotros afrontamos con el desalojo y la defensa de los fundamentos de la cultura, ya que tal vez, si decidiéramos ceder convicciones, burocratizarnos y asumir el rol único que el sistema nos permite, las cosas serían más fáciles. Afortunadamente, no cedemos, no queremos las cosas más fáciles sino más verdaderas, como se dijo también en la mesa de debate, tomando la frase ya tan conocida por todos “La única lucha que se pierde es la que se abandona”.
La participación del Dr. Alejandro Frigerio puede verse en su blog (
http://www.alejandrofrigerio.blogspot.com/)
En nuestra mesa también tuvimos una vez más la grata presencia de Olga y Miguel, en representación de Pueblos Originarios, siempre despertándonos con sus palabras. Siempre repitiendo ese saludo, propio de su pueblo, en el que expresan “No seas ladrón, no seas mentiroso, no seas perezoso y no seas cobarde”. Olga y Miguel, instándonos a ocupar espacios políticos, a ocupar espacios en la educación, a no dejarnos vencer.
Luego tuvimos la presencia de Jorge Xango, uno de esos grandes referentes que pocos/as conocen, y que a todos/as dejó sorprendidos/as con su decir.
Por último habló Diego Bonga, presidente del Movimiento, e hizo mención de la situación legal por la que atravesamos, su relación con las políticas de exclusión, el vaciamiento de la cultura, la falta de memoria.
También participaron las abogadas del Copadi, que nos vienen acompañando en esta resistencia, trabajando en el área legal contra el desalojo. Luciana, una de ellas, fue muy clara al decirle a la gente que hay que tomar conciencia ahora, ya que el espacio, en la situación legal en la que está mañana mismo puede desaparecer.
Finalmente, varios de los asistentes expresaron su opinión u apoyo, como el presidente de la Asociación Misibamba Comunidad Afroargentina de Buenos Aires, y otros/as particulares.
Esta actividad se cerró con la música del grupo de Sikuris Khan Pacha, que con su toque logró crear una atmósfera de compañerismo y unidad inimaginada. Por alguna de esas causalidades tan características de estas cosas los tambores del candombe estaban templándose al fuego. Los sikuris comenzaron a tocar y se desplazaron hasta al lado de la fogata, donde se quedaron en círculo, tocando. La gente poco a poco comenzó a acercarse, hasta que finalmente la mayor parte de los que habían asistido estaban danzando de la mano, en círculo, conteniendo dentro a los sikuris y a los tambores. Largo fue el rato en el que esto se desarrolló, pero nadie parecía cansarse sino mas bien revitalizarse con lo que estaba sucediendo, con esa comunión. Para terminar, como acostumbran, los Sikuris enfilaron para la salida, con toda la gente siguiéndolos, para terminar de tocar en la calle.
Espontáneamente la gente coró la calle con el círculo que formaban, sin proponérselo, danzando. Esto duró unos minutos hasta que la música cesó.
Todos/ as fuimos ingresando nuevamente, y tras disfrutar de otro breve corte comenzó la Roda de Capoeira Angola, en la cual se pudieron apreciar los toques y jogos tanto de los capoeiristas del Grupo Liberación como de los integrantes de otros grupos, que se acercaron a conmemorar juntos con nosotros/ as el asesinato de Zumbí.
En el momento de la roda también se pudieron apreciar las grandes ausencias, de personas que trabajan con la cultura afro y viven de ella, que deberían haber estado allí en ese momento, no porque a nosotros se nos ocurra, sino por lo que el día significa en el marco del trabajo que desarrollan, y por lo que el Movimiento afrocultural significó en la formación de la mayoría de ellos/as.
Sin embargo, y lejos de la ironía, agradecemos ese no estar, puesto que nos abre los ojos, y nos permite ver una vez más quiénes son los/as que verdaderamente están comprometidos con esa lucha y resistencia que encarnamos, en el nombre de Zumbí y de tantos otros que dieron su vida por las raíces de su cultura.
Durante el desarrollo de la roda se fue introduciendo, tanto a través de los cantos como de las palabras directamente dirigidas a los participantes y observadores, ese pedacito de historia que es sistemáticamente negado.
Ese pedacito, gran pedazo, que contamos cada vez que podemos, cada vez que alguien utiliza la palabra Quilombo refiriéndose al desorden, refiriéndose al barullo; cada vez que alguien afirma que la Capoeira es Brasilera, cada vez que se olvidan la raíz, los fundamentos, códigos y valores de la cultura afro, y el sufrimiento de quienes lucharon y luchan para que nosotros/ as hoy podamos disfrutarla, esos fundamentos, códigos y valores que resistieron en el Quilombo dos Palmares y en otros Quilombos, en comunión con los Pueblos Originarios y algunos blancos pobres y marginados.
Como si esto no hubiera sido suficiente, para cerrar la jornada, el candombe llegó. Pero no vino de cualquier modo.
Ni vino directamente de la mano del tambor. Tuvimos el agrado de contar con la presencia y la voz de Heber Piriz, referente indiscutible del Candombe, cantando a Capela aquella canción “Moreno, me dicen porque tengo, la piel negra y el pelo, rizado natural. Y cuentan, que en épocas remotas, mis padres murieron en el medio del mar. Moreno, mi sangre no es negra, mi sangre es roja, roja natural”.
Heber hizo nuevamente de una manera indescriptible vibrar el espacio con su aire, estremeciéndonos a todos/ as, demostrando una vez más que le candombe no es solo percusión, sino tradición, memoria, lucha, convivencia, solidaridad, espíritu.
Luego continuó cantando hasta que Diego Bonga se incorporó, acompañándolo con su tambor. Y así, al candombe sólo fue llamando, y se fueron incorporando otros referentes a tocar. Y cómo sonó, si se pudiera contar, relatar, describir.
Finalmente, ingresó, sumándose a quienes ya estaban tocando Javier Bonga con sus alumnos/ as de la escuela de Candombe del Movimiento Afrocultural.
Allí los tambores rodearon a la gente, conteniendo la danza incontenible en un círculo. Largo rato danzamos nuevamente sin cansancio, esta vez al son del tambor. Y nuevamente apreciamos nuestro logro en el ideal de participación familiar, ya que todas las generaciones confluyeron en esa danza.
Así se puede decir que fue cerrando la conmemoración del Día de la Conciencia Negra, a 313 años del asesinato de Zumbí Dos Palmares, y en representación de todos aquellos/ as que dieron y dan su vida con convicción, luchando por sus raíces, en contra de la opresión y en contra de la esclavitud, física o mental.
Fotos por Nicolás Solo nicolassolo@riseup.net http://argentina.indymedia.org/news/2008/11/639989.php
